Este Agosto que acaba de pasar se cumplieron 77 años, de tal vez la proeza más linda del fútbol peruano, ya que no solo fue un acto destacable dentro del deporte, si no que este trascendió dejando varias enseñanzas que NO debemos olvidar. Mas aun hoy que nuestros deportistas no destacan, en parte por la falta de apoyo, pero también por la falta de virtudes y valores.

En las Olimpiadas de 1936, en el Berlín de la Alemania Nazi, el equipo de fútbol no solo participó, sino que entró al cuadro principal. En octavos de final goleó 7-3 a Finlandia y en cuartos de final ganó 4-2 al poderoso equipo de Austria.

Sin embargo, no pasó a semifinales, pues el partido fue anulado por la organización, quien luego de no lograr que el Perú acepte jugar de nuevo, otorgó la victoria a Austria, la que llegó a ser Sub-campeón mundial.

El partido:

Estadio de Hertha, Berlín, más de 5000 asistentes en su gran mayoría Austríacos, alemanes y Pro-Austríacos. Probablemente el mismo Hitler estuvo en la tribuna oficial, aunque no hay pruebas de esto. Se dice que se anulan 3 goles al Perú, aunque no hay prueba de esto. El resultado oficial es de 4 a 2 para el Perú, gracias a su delantera llamada el “Rodillo Negro”, conformada por Lolo Fernández, Morales, Alcalde y 2 jugadores negros (Magallanes y Villanueva).

El Otro Partido

Esa tarde en una mesa del comité de organización, se decide anular el partido porque la cancha no era reglamentaria y porque aparentemente hubo invasión de cancha al final del partido por parte de algunos hinchas peruanos. Se comunica la decisión al equipo peruano y se invita a sus delegados a sustentar su descargo al día siguiente.

Los delegados peruanos llegan 1.5 horas tarde (algo increíble para cualquiera, menos para nosotros los impuntuales peruanos), la sesión se había levantado y ya fijado nueva fecha para repetir el encuentro.

La Consecuencia:

Conocido el hecho en el Perú, el equipo peruano y toda la delegación peruana reciben la orden de retirarse de las Olimpiadas y volver al país. Austria es adjudicada como ganadora y pasa a la semifinal.

Colombia se solidariza y retira a toda su delegación. Delegaciones como las de México y Argentina manifiestan una propuesta escrita por discriminación.

El escritor argentino Eduardo Galeano narra el hecho a su forma (con algunas incorrecciones como la sede):

http://www.youtube.com/watch?v=95ghuwE5jPQ

Conclusión

Habiendo investigado sobre el tema, me di con la sorpresa que también hay escépticos o incluso peruanos que minimizan el hecho. Se dice que un “peruano no ayuda a otro peruano” y eso es algo que debemos combatir, pues aquí sí hubo una proeza:

Agosto de 1936, meses después de la entrada en vigor de las famosas leyes xenófobas de Nüremberg, poco antes de la anexión de Austria y en pleno régimen totalitario bajo el mando de Hitler y el partido Nazi (NSDAP), eran tiempos muy difíciles, en los que se hacia únicamente aquello beneficioso para el régimen, la libertad  de prensa era muy limitada y corrientes como “la teoría de las razas” estaban en boga. Austria, país de nacimiento de Hitler debería demostrar a toda costa que era igual o incluso mejor que Alemania y por supuesto, demostrar que era mejor que cualquier país considerado “inferior” (Perú por ejemplo). Entonces, no es ninguna locura pensar que ese partido fue jugado bajo una presión extrema y que luego del resultado, la organización fue presionada para deshacer el partido y convocar a uno nuevo, procurando que Austria sea la vencedora.

Por ello, era sumamente meritorio el que el Perú ganase 4-2, pero más ejemplar aún, que rechace jugar de nuevo y rechace seguir compitiendo humillando así a Hitler y su régimen.

Es una linda historia que nos muestra un nivel alto de fútbol, así como gran entrega, garra, coraje y dignidad. Atributos, lamentablemente desaparecidos en las selecciones de fútbol contemporáneas.

Ahora que estamos próximos a jugar contra Venezuela por las eliminatorias al mundial (las que tenemos prácticamente perdidas), me cuesta trabajo imaginarme un equipo peruano ganador en su propio país, pero simplemente imposible de poder ganar en Alemania un partido a un equipo europeo de alta calidad, como lo fue en ese entonces Austria (en ese mundial Austria quedó sub-campeón).

De nosotros depende el inicio del cambio, ejemplos nos sobran.

* La imagen es el titular publicado el 10 de Agosto de 1936 por el diario "El Comercio"